lunes, 31 de marzo de 2008

Aprender a escuchar

¿Qué es lo contrario de hablar? La respuesta suena demasiado obvia, escuchar. Nada más lejos de la realidad, normalmente lo contrario de hablar es esperar tu turno para hablar. La mayoría de personas no escuchan con la intención de comprender sino para contestar.


En pareja, originalmente cargada por angie_dj.

¿Conversación o monólogo colectivo?

Tenemos tendencia a precipitarnos, a arreglar las cosas con un consejo rápido. No nos tomamos tiempo para diagnosticar, para empezar a comprender profunda y realmente a la otra persona. Según Stephen Covey el principio fundamental de las relaciones interpersonales puede enunciarse en su quinto hábito: Procura primero comprender y después ser comprendido.

Aprender el arte de escuchar te ayudará a tener más éxito en tu vida personal y profesional. Puedes desarrollar relaciones más profundas, una conciencia profesional más aguda y un entendimiento más profundo en las relaciones de pareja.
Buscando en el blog de Tina thinksimplenow encontré: Técnicas para convertirte en un oyente efectivo. Aprendió estas técnicas en cursos de comunicación, seminarios y libros de relaciones personales.

Conviértete en espejo de la otra persona.

Copia las expresiones y posturas de la otra persona. Actúa como si fueses su imagen en un espejo. Ser su imagen te permitirá sentir lo que sientes y tener un entendimiento más profundo de los sentimientos que van unidos a las palabras.

Céntrate en el otro, no en ti mismo.

En una conversación, a veces podemos perdernos en nuestros propios pensamientos: ¿Qué voy a decir después? o pensamientos aleatorios del tipo ¿Qué haré esta noche? ¿Qué pensará de como voy vestido?. El truco es cambiar nuestra atención hacia el que habla. Dale la completa atención, interésate en él y en lo que dice. Se un buen oyente, anima a la otra persona a hablar sobre ella.

Practica la escucha activa.

Como hemos comentado es fácil perdernos en nuestros pensamientos o planear una respuesta mientras el otro habla. Practica la escucha activa para centrarte en escuchar.
  • Repite lo que el otro dice en tu cabeza con tus propias palabras. Interioriza el significado de las palabras.
  • Resume lo que escuchas. Una técnica consiste en "refrasear" las palabras del que habla y repetírselas. Esto indica que entiendes lo que dice y da una oportunidad al que habla de clarificar sus pensamientos. Lo qué estas diciendo es... Según lo entiendo, intentas expresar...
  • Encuentra el mensaje. No escuchar sólo con el oído, también con el corazón y el alma. Conecta con el otro. Hay más que palabras. Pregúntate: ¿Qué intenta decir? ¿Cuál es el punto clave?.
No descuides el lenguaje corporal.

Haz saber al que habla que estas prestando atención y que te importa lo que está diciendo.
  • Haz contacto visual. Indica que estas prestando atención. Asegúrate de que tus ojos no deambulan por el entorno que hay detrás de la persona. Una técnica es centrarte en un solo ojo, esto indica concentración y te ayudará a mantener la atención.
  • Sonríe. Cuando nos concentramos, tendemos a no tener expresión facial y esto puede interpretarse como enfado o falta de atención. Recuerda sonreír.
  • Usa hmm, entiendo. Este tipo de expresiones entre frases indica a la otra persona que sus palabras son oídas y entendidas.
  • Inclínate hacia adelante. Inclínate ligeramente hacia la otra persona, esto indica que estas interesado en lo que la otra persona dice y que le das todas la atención.
Pregunta.

Pregunta para clarificarte. Las personas aman las preguntas, siempre que seas consciente de que no interrumpan el flujo de sus pensamientos. Esto indica que escuchas y que sigues la conversación. Sondea para encontrar información adicional. Algunas buenas preguntas empiezan por: ¿Cómo? ¿Por qué? por ejemplo ¿Cómo sucedió? ¿Y cuál fue tu reacción? ¿Por qué tomaste esa decisión?.

No juzgues.

En las conversaciones, a menudo pensamos en argumentos en contra o a favor de lo que el otro dice. Escucha abiertamente reconociendo que la otra persona se está expresando, y dale la libertad de hacerlo. Por otro lado, no nos gusta que nos juzguen cuando hablamos, por tanto ¿Por qué debemos juzgar a los demás?.

No interrumpas.

Deja al que habla desarrollar sus pensamientos. No hables hasta que el otro no haya terminado. Si tienes algo que decir, muérdete la lengua hasta que acabe. Se paciente, espera tu turno. Recuerda lo molesto que resulta cuando te interrumpen a ti. Respeta los demás y déjalos terminar.Si te desconcentras cambia la posición del cuerpo. Si ves que tu mente se evade de la conversación, usa alguna de las técnicas comentadas para concentrarte.

¿Tienes algún truco para escuchar? Compártelo en El Inconformista y si te gusta lo que lees no olvides de suscribirte .

8 comentarios:

Ekaizen dijo...

Buenas, ya me habían comentado la mayoría de estos puntos en algún apartado de un curso de management al que acudí el año pasado.
He de decir que como casi todas las cosas, es más fácil decirlo que hacerlo.
En el trabajo se producen situaciones en las que te sientes molesto porque sientes que alguien no te ha escuchado con suficiente atención. Pero en la siguiente oportunidad somos nosotros los que no prestamos atención a nuestro interlocutor.
Realmente una buena escucha es algo muy dificil de realizar así que gracias por recordarnos los principales aspectos a tener en cuenta.
Saludos

Senior Manager dijo...

Trasladando la palabra "escuchar" a la empresa...Podría decir que también significa ponerse en los zapatos del otro y de vivir en cierta forma su realidad a través de sus palabras. No sólo hay que escuchar, también hay que poner atención para comprender lo que realmente nos quieren decir más allá de las palabras.

Pedro Robledo dijo...

Hola Óscar,

Ha costado pero ha merecido la pena. Este artículo tendría que leerlo mucha, mucha gente.

Un saludo!

Oscar dijo...

@ekaizen: Tienes razón es más fácil decirlo que hacerlo, pero bueno es bueno llevarlo en la cabeza. La comunicación solucionaría muchos problemas.

@sm: Siempre hay algo más, ¿qué sucede realmente? uno no puede quedarse en lo externo. Cuando atacas la raiz es cuando los problemas se solucionan.

@pedro_robledo:Estoy de acuerdo contigo por eso llevo días trabajando en este post y desde hace mucho leyendo cosillas sobre el tema. Es algo que me preocupa. Me alegra que te guste.

Gracias a todos por comentar y siento el retraso, pero entre los problemas técnicos y otras cosillas he andado un pelín liado. Un saludo.

David D. dijo...

Hola Óscar:

Lo de ser el espejo del otro es un truco buenísimo. Es algo que hacemos las personas de manera innata: Si estamos hablando con otra persona, y estamos en sintonia (opinamos lo mismo, tenemos el mismo carácter, etc.) adoptamos la misma posición física del cuerpo (la posición de los brazos, la forma de estar sentados, la inclinación de la cabeza, etc.) Esto es algo que podemos usar en nuestro favor... Por ejemplo, si queremos que nuestro interlocutor sintonice con nosotros, podemos hacer conscientemente lo que normalmente hacemos inconscientemente... adoptar la misma postura que la otra persona.

Es realmente útil... Os recomiendo probarlo. Sin embargo es un arma de doble filo... Si la otra persona conoce esta técnica, se dará cuenta de que estais forzando la postura y se lo puede tomar a mal (como que intentas influir en él) o bien (como que intentas que la conversación salga exitosa).

En cualquier caso es una herramienta que se aprende a usar practicando.

Un saludo

David D.

PD: Un buen post, como siempre. Vaya nivel que mantienes :-)

Oscar dijo...

Hola David,

si es un tema interesante. Por ejemplo imagina que quieres hablar con un niño que esta sentado en un escalón, ¿no sería mejor sentarse a su lado para hablar?

El otro dia un compañero y yo bromeamos el se subio la silla como si estuviera por encima de mi, era comico pero no era cercano. Hablar a la misma altura desde el mismo plao, compartir la comida, o un buen vino.

Como dices no se fuerza lo hacemos de forma innata.

Un saludo y me alegra que te guste.

Unknown dijo...

hermozo pero quisiera que diera mas información, podría agregar tecnicas de concentración o los tonos correctos de voces. El escrito contiene algunos errores ortográficos, de concordancia.

Oscar dijo...

Hola vero, gracias por tu comentario, algún día profundizaré más en la comunicación. A mi me cuesta lo del tono de voz, a veces la gente no sabe si voy en serio o en broma.

Miraré el artículo para encontrar los errores, gracias por la indicación.

Un saludo.

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